Cómo saber si mi hijo está metido en líos
Cómo saber si mi hijo está metido en líos
En la actualidad vivimos en un mundo global, gracias a internet, y ello ha posibilitado numerosas ventajas para nuestros hijos, como el acceso libre a la información. Pero también es más fácil que encuentren problemas.
A primera vista, puede parecer que contratar a un detective privado para que siga a nuestro hijo, puede parecer exagerada, pero a veces, puede ser una forma óptima de solucionar un problema familiar antes de que se convierta en una catástrofe.
A continuación, vamos a enumerar una serie de alarmas y puntos rojos sobre los que merece prestar especial atención.
Estos son los veinte motivos para contratar un detective privado:
- Cuando los padres preguntan a los hijos cosas sobre sus actividades y los hijos no contestan o mienten.
- Cuando la conducta de los hijos menores de edad puede poner en peligro, de forma voluntaria o involuntaria, el patrimonio familiar, como responsables civiles subsidiarios.
- Cuando los hijos abandonan la casa sin dar explicaciones y los padres no los encuentran en los lugares que frecuentan.
- Cuando sufren un grave acoso escolar o bullying por parte de sus compañeros, o cuando son ellos los acosadores.
- Cuando los hijos tienen evidencias de haber recibido malos tratos, físicos o mentales y los padres desconocen el origen y los motivos.
- Cuando los hijos dan respuestas incongruentes sobre sus signos externos, que denotan violencia activa o pasiva, consumo o tráfico de drogas, alcohol, etc.
- Cuando los hijos pasan muchas horas, desde la salida de la escuela, hasta que vuelven a la casa, sin querer explicar sus actividades. O si pasan los fines de semana fuera de casa, sin querer decir dónde, ni con quién han estado.
- Cuando aparecen signos se depresión y trastornos emocionales sin saber los motivos.
- Cuando dicen que se van a dormir a casa de un amigo pero han mentido.
- Cuando ocurre un embarazo no deseado, sobre todo en hijos menores de edad.
- Cuando se producen accidentes automovilísticos, agresiones, violencias, con daños físicos o materiales, realizados contra ellos o por ellos mismos.
- Cuando los hijos faltan reiterativamente a la escuela sin ninguna justificación, falsifican las notas de asistencia y los resultados escolares. Los padres no saben dónde están durante ese periodo y tienen que enterarse.
- Cuando los hijos manejan más dinero del que los padres les dan, para su gastos semanales, gastando mucho en ropas, electrónica, viajes y sitios de diversión, para lo cual inventan gastos extras, roban dinero o tarjetas de crédito a los padres o desaparecen de la casa cosas de valor.
- Cuando aparecen problemas derivados del mal uso o adicción a Internet, y los padres sospechan que detrás de Internet, hay personas mayores intentando pervertirles.
- Cuando frecuentan la noche y regresan a la casa en malas condiciones físicas o con síntomas de intoxicación por alcohol o drogas.
- Cuando se han metido o estén al borde de meterse en problemas que tengan repercusiones de responsabilidad civil, penal o económica.
- Cuando los padres sospechan que andan con pandilleros o amigos de costumbres delictivas, en sectas o asociaciones peligrosas, bien como miembros, reclutadores o dirigentes.
- Cuando sufren un cambio brusco en su relación y comunicación familiar, de amistades o de estudios.
- Cuando aparecen síntomas o huellas de trastornos en su físico y en la alimentación, producidos por la anorexia, bulimia, etc.
- Cuando roban medicinas en casa o en casa de amigos o familiares, con el objetivo de producir drogas.
Con este post no queremos asustar a ningún padre, sino enseñarles a prevenir posibles problemas en un futuro, que esperemos, nunca lleguen a darse. Desde la Agencia de Detectives Privados Owl, en Zaragoza, siempre velaremos por su seguridad y de las de todos los que les importan.
Gran artículo de un gran profesional